9 de marzo de 2011

El indomable Will Hunting

En esta ocasión, apartándome un poco del hilo conductor de éste blog, voy a comentar algunos aspectos de la película “El indomable Will Hunting”, debido a la solicitud del profesor de la asignatura motivadora de la creación de éste blog (en su apartado de matemáticas).


Me parece interesante reseñar la visión totalmente opuesta de dos científicos del mismo campo (matemática) respecto a la formación, trabajo, futuro, realización personal, objetivos en la vida etc.

Por un lado tenemos a Will Huntig (interpretado por Matt Damon) que es un joven,  sin formación reglada específica,  cuya capacidad intelectual es muy alta, a la altura de los mejores profesionales de la materia. Sin embargo esto él lo trata de esconder en su relación diaria con el resto de la gente (aunque cuando ésta solo éste cultiva continuamente su intelecto con la lectura de inumerables libros de todo el espectro del conocimiento), llevando una vida normal de “chico de barrio”, ocupado en un trabajo sencillo que no está a su altura intelectual (limpieza y mantenimiento de edificios), pero que le permite pasar desapercibido y dedicarse a estar con sus amigos             que para él es lo más importante (salir a emborracharse, buscar pelea, etc.).

Le gusta sentirse como participante de un grupo en igualdad de condiciones  en el que es uno más y no como una persona con un don especial distinta a los demás. Este personaje podemos definirle como un científico que su objetivo en la vida no es su trabajo, fama ni dinero, sino las relaciones personales, la inteligencia emocional, etc.


Por otro lado, en contraposición con Will está el profesor de la universidad de Harvard (en la que Will trabaja como personal de mantenimiento), Gerard Lambó (interpretado por Stellan Skarsgård), prestigioso matemático ganador de la medalla Fields. Es un científico con una sólida formación reglada, para el que lo más importante en su vida es el trabajo. Todo el sentido de su vida gira entorno a aprovechar al máximo su capacidad para desarrollar todo lo que pueda su trabajo, no tiene en cuenta apenas otros apartados como son las relaciones personales, pertenencia a grupos, etc. Dicha personalidad la intenta inculcar en Will Hunting haciéndole ir a continuas entrevistas de trabajo, esforzándole al máximo en su trabajo diario, etc. Este personaje podemos definirle como un científico que su objetivo en la vida es su trabajo, la fama, el dinero, etc. En definitiva, es un poco el retrato robot que la gente de a pie tiene de un científico, quizás dado por el estereotipo mostrado en el cine y la literatura de ésta profesión.

Como resumen, me gustaría reseñar que como cualquier otra profesión, la de científico (en este caso matemático) está influenciada por la personalidad del sujeto y las decisiones que va tomando entorno a ésta, no es una estructura o patrón rígido que hay que seguir por obligación. Lo importante es ser consecuente con la personalidad de cada sujeto y decisiones que se van tomando de acuerdo a ésta, para conseguir los objetivos en la vida, sea cuales sean en cada sujeto.



5 de marzo de 2011

La física de Willy

Hoy os quiero presentar unas reflexiones, cuando menos curiosas, que suceden a menudo en el mundo de los dibujos animados, con respecto a la física.

Aplicable a casi todos (o todos) los dibujos animados en mayor o menor medida, tomaremos como ejemplo a Willy, el pobre coyote que nunca consigue alcanzar a su presa, el correcaminos, a pesar de ser un gran conocedor de la física, ya que aplica toda clase de conocimientos científicos en sus inventos (resortes, poleas, catapultas, péndulos, cálculos para determinar la máxima distancia horizontal que alcanzará un proyectil, la trayectoria de un tiro parabólico o la caída libre), pero la física del mundo real no aplica a su mundo (desgraciadamente para él…)


 Veamos algunas de ellas:

  • La gravedad:  Todo cuerpo suspendido en el aire mantendrá su situación hasta que se dé cuenta de ella. Cuando el coyote está a punto de atrapar al correcaminos, mira hacia abajo y ve que no hay suelo, por lo que cae hasta convertirse en un puntito de polvo al acabar el descenso; en cambio al correcaminos no le afecta la gravedad ya que no mira hacia abajo.




  • Tiro parabólico: Todo cuerpo sólido en movimiento se mantendrá así hasta que es parado por otro material sólido. Cuando el coyote se convierte en un proyectil lanzado por un cañón, su trayectoria es rectilínea y no parabólica ya que la aceleración de la gravedad no le afecta.


 


  • Resistencia del material:  Todo cuerpo sólido que atraviese materia sólida dejará un hueco de acuerdo a su perfil. La dureza, plasticidad de cualquier material es siempre la misma, ya que la silueta de los personajes quedan siempre impresa perfectamente en cualquier material.


 


  • Integridad física: Todo personaje puede plegarse como un acordeón, desintegrarse, quebrarse, romperse en pedazos, quemarse, etc. sin dañar su integridad física.




En definitiva, estos dibujos son una excelente herramienta para enseñar de manera atractiva a los alumnos de secundaria los principios y leyes físicas que en ellos se muestran: